“Por una vida dedicada al deporte, por sus valores humanos y sus éxitos profesionales, y por su especial vinculación con Madrid” reza la exposición de motivos de la Medalla de Oro que la ciudad de Madrid, tras ser aprobada en pleno por el Ayuntamiento, ha concedido a Vicente del Bosque. El técnico salmantino ha sido uno de los reconocidos en una ceremonia ya tradicional en el día de San Isidro, 15 de mayo, en el Palacio de Cibeles, sede del consistorio madrileño. Este ha sido lugar de encuentro de representantes de la vida política, social, económica y deportiva de la ciudad. Entre los presentes, la vicepresidenta del Gobierno de España, Soraya Sáenz de Santamaría, el presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, y como anfitriona, la alcaldesa de Madrid, Ana Botella.
Del Bosque, que ha estado acompañado por su familia, ha expresado en su discurso la emoción del momento, tras ver un video con palabras de su mujer, hijos y seres queridos: “Me siento de Madrid, donde se han criado mis hijos. Madrid ya ha cumplido de sobra conmigo, tengo un pabellón con mi nombre. Sin la victoria nada hubiera sido igual, no estaríamos aquí. Me valoran por mi historial y porque dicen que soy buena persona. Estoy orgulloso de lo que he vivido como jugador y como entrenador. Pero nadie debería ser premiado por ser bueno. No haré un ejercicio para demostrar que no lo soy. Felicito a las personas que han conseguido hoy esta Medalla. Ellos son extraordinarios. Debemos tener responsabilidad social y preocuparnos por aquellos que tienen problemas. Debemos ofrecer lo que tenemos en tiempo o dinero. Los que tenemos una cierta imagen pública intentamos poner nuestro esfuerzo pero los esfuerzos de compromiso de cualquiera son necesarios. Nos premian por nuestros éxitos, y nuestros jugadores son artífices de esos éxitos. Los entrenadores tratamos de darles una organización, un espíritu competitivo, a unos jugadores que tienen mucho talento. Un entrenador no es nadie sin su equipo técnico. Estoy feliz de representar y compartir mi trabajo con los jugadores de la Selección. Son referentes morales, y espero que sean buenos ejemplos cada día. Ellos deben favorecer a la juventud, creo en ellos, que deben de ser infalibles con su conducta, y ejemplo de juego limpio. Llevo toda la vida alrededor del fútbol, un fútbol en el que cada fin de semana, en Madrid, se juegan 2500 partidos, con 86000 licencias,… El fútbol es un fenómeno inigualable. Y ahora nos reconforta el buen momento de España. El Sevilla FC se proclamó ayer campeón de la Europa League, la semana próxima viviremos la final de la Champions entre Atlético y Real Madrid… Todo es un orgullo para nosotros. El fútbol ha salido reforzado en la sociedad española. Es un fenómeno que genera gran simpatía y que en algunas cuestiones va por delante de la sociedad civil. Decía al principio que estoy aquí por haber ganado, pero estamos obligados a trasladar ética a la sociedad, y en el fútbol debemos respetar las normas, y del vencedor al vencido. Eso he intentado trasladar a lo largo de mi carrera. Nosotros seguimos un camino marcado por el recordado Luis Aragonés y tratamos de hacerlo lo mejor posible. Tratamos de hacer un equipo unido y emocionado, todos debemos tener un sueño en el desafío de la Copa Mundial de Brasil. Ojalá estemos a la altura del apoyo de la ciudad y de la sociedad española. Muchas gracias”.
"Llevo toda la vida alrededor del fútbol, y es un fenómeno inigualable. En Madrid se juegan cada fin de semana 2.500 partidos y tenemos 86.000 licencias"
El entrenador español compartió plantel de personalidades e instituciones distinguidas con Rafael Matesanz Acedos, Cáritas Diocesana de Madrid, reconocida por su labor de atención a las personas en riesgo de vulnerabilidad y exclusión social, y la Fundación Ortega-Marañón por su actuación en el ámbito del pensamiento, la educación, el humanismo y la ciencia.
A Del Bosque y Matesanz se les reconoce por sus carreras: al primero por una vida dedicada al deporte y al segundo por ser creador de la Organización Nacional de Transplantes. La alcaldesa de Madrid, Ana Botella, destacó en su alocución "
La Medalla de Oro de Madrid es la máxima distinción que concede el Ayuntamiento a aquellas personas e instituciones que, además de haber destacado en sus correspondientes campos, tienen una especial vinculación con la ciudad.