Hace 9 años nos dejó Antonio Puerta, figura admirada y llorada del fútbol español
El tiempo no ha hecho perder ni un ápice del brillo que la zurda de diamante sigue manteniendo en los corazones de todos los aficionados al fútbol.
El mismo órgano vital que le falló de puro grande a Antonio José Puerta Pérez un 28 de agosto del año 2007, tres días después de haber sufrido una parada cardiorrespiratoria durante un Sevilla - Getafe disputado en el estadio Ramón Sánchez-Pizjuán de la capital hispalense.
Tras varios ataques más el corazón de Puerta terminaría rindiándose en el Hospital Virgen del Rocío dejando un hueco que aún hoy la fiel hinchada sevillista trata de llenar cada vez que un encuentro transcurre por el minuto 16 -su inolvidado dorsal a la espalda- sobre el césped de Nervión.
Luis Aragonés le hizo debutar en la Selección durante un encuentro ante Suecia en Estocolmo
Fue ése el barrio que vio nacer a Puerta en noviembre de 1984 y donde daría sus primeras patadas al balón antes de ingresar en la cantera sevillista con sólo nueve años de edad.
Del Pizjuán al cielo de la Selección con la que debutó de la mano de otro ilustre y añorado como Luis Aragonés el 7 de octubre de 2006 durante un encuentro ante Suecia en Estocolmo en el que sustituyó a Joan Capdevila en la segunda parte.
Allí coincidió con amigos como Sergio Ramos que menos de un año después de su pérdida celebraron con su recuerdo presente la Eurocopa ganada en Viena por España, preludio de otros grandes títulos para el combinado nacional.
Por calidad y trabajo Puerta pudo estar allí sobre el campo festejando los éxitos del equipo de todos. Su memoria, como el de Dani Jarque o Miki Roqué acompañó los éxitos de los internacionales aquellas noches de gloria. Antonio, de alguna forma, estaba allí. El resplandor de su zurda de diamante sigue hoy brillando en nuestro recuerdo.