SUPERCOPA | Un retrato pintado con unas botas de fútbol servirá para conocer al Man of the Match de la final
El artista Mark Ríos, Mr. Dripping, prepara una espectacular puesta en escena con la que hacer público quién es el mejor futbolista del torneo
Cae la noche sobre Riyadh. Son las 21:20 horas de un fresca -para estas latitudes- noche de invierno. Los focos del monumental estadio King Fahd están encendidos, las gradas repletas y los jugadores del equipo ganador de la Supercopa (si no hay prórroga ni penaltis) se abrazan eufóricos al escuchar el pitido final de César Soto Grado. El ambiente es festivo para muchos, amargo para unos pocos, pero inspirador a la par que apremiante para uno solo.
Esa persona se llama Mark Ríos, barcelonés, cosecha del 87 y conocido mundialmente con el sobrenombre artístico de Mr. Dripping (goteo en inglés) por su particular técnica pictórica inspirada en Jackson Pollock y otros expresionistas abstractos de dejar gotear la pintura sobre el lienzo con una espátula sin que ésta llegue a tocar físicamente el retrato.
"Siempre me ha obsesionado esa transición entre lo abstracto y lo figurativo", declara el que durante esta #superSupercopa es el artífice de los retratos con el que se premia al mejor jugador de cada partido y que para la gran final tiene preparado un show digno de cualquier galería de vanguardia.
A diferencia de las semifinales, en las que el premio consistió en la figura estilizada del jugador, esta vez Mr. Dripping dibujará con su tácnica el rostro del futbolista designado como el Man of the Match
Porque Mr. Dripping, en cuanto el árbitro pite el final del encuentro entre Athletic Club y Real Madrid, comenzará, ayudado de unas botas de fútbol sobre el mismo césped del estadio, a reproducir el rostro del futbolista ganador del Man of the Match para que el mundo sepa de tan innovadora forma quién ha sido el mejor de todos los jugadores que participen en la final.
Una obra de arte nacida a partes iguales del talento y la prisa, pero ante la que Mark Ríos no se deja amedrentar: "Siempre tengo ese punto de nervio y emoción, pero por suerte he aprendido a controlarlo. Estoy confiado en que lo haré bien y a la gente le va a gustar".
Con esa premisa, unas botas de fútbol -puede que incluso las del futbolista ganador- y unos litros de esmalte negro con poliuretano, Mr. Dripping se prepara para maravillar este domingo al planeta fútbol de la misma forma que los jugadores sobre el campo: con toneladas de trabajo a cuestas, mucha técnica artística acumulada y unas gotas de genialidad para darle el toque final a la obra.