MUSEO VIRTUAL (XII) Homenaje a uno de los mejores colectivos arbitrales del mundo
España ha tenido, desde el mismo comienzo del fútbol, unos excelentes colegiados que han dejado su sello en nuestro país y en el mundo. Por eso, el Museo de la Selección reserva una gran vitrina dedicada al Comité Técnico de Árbitros donde se guardan tesoros como camisetas antiguas, botas, cronómetros, tarjetas firmadas y un mural donde aparecen todos los colegiados españoles que han sido internacionales desde el año 1925 hasta el día de hoy.
Nada más bajar de la sala Siglo XXI, los visitantes pueden encontrar un espacio en el que se hace homenaje a unos deportistas sin los que el fútbol sería impensable: los árbitros. Una historia que empezó con Luis Colina, a mediados de los años 20, y que tuvo en Pedro Escartín al primero que acudió, como asistente, a un Mundial, el de Italia 1934. El primero que dirigió un partido fue Ramón Azón, en Brasil'50. Juan Gardeazábal es el colegiado español que ha estado en más Copas del Mundo. Arbitró en Suecia'58, Chile'62 e Inglaterra'66. En el segundo de ellos llegó a dirigir el choque por el tercer puesto entre Chile y Yugoslavia (1-0). El valenciano Antonio Miguel Mateu Lahoz se convirtió en 2018 en el decimoquinto árbitro español en dirigir un partido de una Copa del Mundo.
Además, el Museo guarda las tarjetas, la equipación e incluso las botas, por cierto con restos aún del césped del antiguo Soccer City, de Howard Webb, el colegiado que arbitró la final del Mundial de 2010 en la que España se alzó con la copa del Mundo. Este árbitro inglés cedió este material al Museo de la Selección española.
Este es tan solo un pequeño homenaje que el Museo rinde a un colectivo que por su prestigiosa historia y su profesionalidad y dedicación en el presente también encarna la “marca España” por el mundo.
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